3.- Mono capuchino ecuatorial
Nombre: Mono capuchino ecuatorial
Orden: Primates
Familia: Cebidae
Provincias
Esmeraldas,
Carchi
Regiones naturales
Bosque
Piemontano Occidental, Bosque Húmedo Tropical del Chocó. Se distribuye
desde el norte de Honduras hasta el noroccidente de Ecuador (Ruiz-García,
2016). En Ecuador habita en la costa norte y en las estribaciones
noroccidentales, en los bosques tropicales y subtropicales.
Identificación
Los monos capuchinos ,son animales de
corta altura, con una cola de la
misma longitud que la de su cuerpo. Sus extremidades son largas y hábiles
para sujetar objetos, a la vez que sus dedos pulgares son oponibles. Su cola
prensil les ayuda a sujetarse en las ramas y la usan también como soporte extra
al moverse.
El
cráneo de los capuchinos gráciles es diferente del de los robustos, ya que es
ligeramente más redondo. Asimismo, poseen extremidades más largas en relación
con el tamaño de su cuerpo. Miden de 30 a 56 centímetros de longitud, con una
cola de medida similar.
Los
capuchinos son dueños de un corto pelaje negro, marrón, ante o beige muy claro.
La cabeza de los capuchinos robustos está adornada con un mechón de pelo, pero los gráciles
carecen de él.
Dieta
El
mono capuchino, por su dieta muy
oportunista, es considerado como omnívoro. Se caracteriza por la mayor
variabilidad dietética de los monos del Nuevo Mundo. Sin embargo, se alimenta
principalmente de frutos (65%) y
hojas (15%).
El
resto de su dieta se compone en gran parte de insectos y otros invertebrados
como arañas, cangrejos u ostras, pero también pequeños vertebrados (lagartos,
aves, ardillas jóvenes y coatíes) o huevos, semillas, nueces, corteza,
capullos, gomas y flores.
Reproducción
El
estado reproductivo de las hembras capuchinas no es visible en el sentido de
que no hay cambio de color o morfología en el momento del celo. Los
comportamientos proceptivos también son raros en esta especie, sin embargo, han
observado intercambios recíprocos de miradas e inclinaciones de la cabeza, así
como otros comportamientos tales como “olfatear la orina” o “cara de pato “,
“piruetas” y “mirar entre las piernas” justo antes de los montes.
Los
montículos sexuales no son muy reveladores de la jerarquía masculina, ya que,
en esta especie, todos los machos parecen tener acceso a las hembras. No hay
consorte aparente, aunque el macho alfa es el padre de la mayoría de los
jóvenes. La gestación dura entre 157 y 167 días y las hembras dan a luz por
primera vez alrededor de los 7 años de edad y el intervalo medio entre
nacimientos es de 26,4 meses.
Los machos pueden llegar a ser reproductivos alrededor de los 6 años de edad, aunque muchos autores consideran la madurez sexual a más de 7 años de edad en esta especie. Además, Jack y Fedigan, señalan que los machos pueden tardar 10 años en alcanzar la madurez física.
No
hay datos sobre la senescencia de la fertilidad entre los capuchinos. No hay
estacionalidad de nacimientos entre los monos capuchinos, pero hay un pico de
nacimientos durante la estación seca.
Primordiales Amenazas
En
Ecuador, señala el informe, las tasas de deforestación han sido extremadamente
severas. Entre 2000 y 2010 sufrió la mayor tasa de deforestación en América del
Sur, especialmente en la región costera, donde permanece menos del 10% de su
cubierta forestal original y de forma fragmentada, lo que no ayuda en la supervivencia de los primates que
dependen de la conectividad de su hábitat para la locomoción, la alimentación y
la dispersión.
La
extinción de los monos causaría un gran desequilibrio en los ecosistemas,
debido a que son grandes dispersores de semillas y por tanto son indispensables
para el mantenimiento del bosque tropical.
Comentarios
Publicar un comentario